Goyo García, boxeador de Poza Rica que peleó en la misma función con Julio César Chávez en las Vegas, USA en 1995 (Foto: Jorge Huerta E.)

– Gregorio García prepara a niños para cumplir su sueño en el deporte más completo, el box

– El pugilista nacido en Poza Rica participó en dos ocasiones en la misma función del campeón mexicano

Por Jorge Huerta E./ informatePR

Poza Rica, Ver.- Para triunfar en el cuadrilátero hay que tener hambre, señala el boxeador pozarricense Gregorio García Hernández, quien peleó en las Vegas Nevada (USA), aquel legendario 16 de septiembre de 1995, cuando Julio César Chávez peleó por el campeonato mundial contra David Kamau, y él hizo lo propio ante Michael Carbajal.

Aunque no pudo ganar en esa ocasión, nuestro pelador ya pisó escenarios internacionales acumulando experiencia, misma que en la actualidad transmite a niños de Poza Rica y la región, pues vienen a practicar infantes de los municipios vecinos, algunos con sueños de alcanzar la gloria en este deporte que requiere capacidad física, tiempo de entrenamiento y mucha disciplina.

Sin importar la edad, menores acuden a aprender la disciplina del box en la escuela de Goyo García (Foto: Jorge Huerta E.)

Goyo García tuvo que emigrar para una mejor preparación durante su carrera deportiva, ya que en la región no existía el fogueo suficiente, por lo que llegó a los establos del barrio bravo de Tepito en la CDMX, donde vivió en carne propia las desventuras de haber salido de la provincia y llegar al lugar del box mexicano por excelencia, de donde han surgido grandes peleadores para dar nombre a nuestro país en este deporte.

El club

La “Escuela de box Goyo García”, se encuentra en un espacio público. Dista mucho de ser un gimnasio con clima o comodidad alguna, el piso es de tierra y se encuentra sobre algunas tarimas de madera; es realmente una galera, donde diariamente hay que sacar y guardar los implementos como peras y costales, incluso, las mesas tienen que ser encadenadas para su seguridad, pues se encuentran expuestas a los transeúntes.

Lo que es un “cuadro” de un pozo petrolero (245 Poza Rica), en las inmediaciones del andador Hidalgo, se ha convertido en un verdadero complejo deportivo popular; ahí conviven atletas, volibolistas, futbolistas infantiles, practicantes de tochito y por supuesto pugilistas. Los alumnos de García Hernández llegan de distintas colonias de la periferia, también de Coatzintla y Tihuatlán, municipios vecinos.

Diversas actividades deportivas se han incrementado en torno al pozo Poza Rica 245, conocido como andador Hidalgo (Foto: Jorge Huerta E.)

El gimnasio funciona en un espacio que es más que suficiente para la práctica de su deporte favorito, la pasión y las ganas son fundamentales en su preparación, el hambre de la que habla su mentor es precisamente el hambre de triunfar, de querer hacer algo en este deporte que se encuentra tras el paso de horas de dedicación y sufrimiento, donde el trabajo físico es la base.

La disciplina del ejercicio debe ir acompañada de una buena alimentación, balanceada, pero algunos de los practicantes que no cuentan con los recursos suficientes, deben buscar la manera de solventar esa necesidad, pues existen prioridades que no siempre les permite acceder a la nutrición requerida, de provisiones que el cuerpo necesita ante el desgaste corporal, lo que se convierte en todo un desafío.

De atletas naturales

El maestro Goyo, como es llamado por la gente que lo estima, comenta que le da cabida a cualquier niño o niña que quiere aprender el arte del boxeo, pero hace hincapié en que no todos tienen facultades para llegar a ser boxeadores profesionales. Él mismo les anticipa y los conmina a entrenar, pero no es vendedor de humo, de tal modo que pueden entrenar cuanto quieran, y les explica a quienes sí y quienes no, tienen futuro en esta tan difícil práctica.

Diariamente, deportistas de Poza Rica y la región se dan cita en la escuela de box «Goyo García» (Foto: Jorge Huerta E.)

“En una ocasión vino un muchacho con muchas ganas. En los primeros meses trabajó bastante duro, pero conforme fue avanzando el tiempo se fue intensificando el entrenamiento. Sólo aguantó seis meses”. García comenta que otro de los factores es la integración de las carteleras, pues al no existir mucha actividad boxística se enfrentan peladores con experiencia contra novatos, lo que ha provocado que algunos de ellos prefieran retirarse.

Explica que hay que saber llevarlos, poco a poco, su preparación se debe combinar con la experiencia de peleas, sin exponer a los nuevos valores. De ese modo, van acumulando confianza en sí mismos, mientras sus capacidades se van acrecentando. Hasta el momento, contabiliza a ocho peleadores, entre hombre y mujeres, aunque veamos entrenando a un grupo más numeroso.

Las medallas

Motivo de orgullo ha sido que en las diferentes competencias sus alumnos siempre sobresalen. Han ganado diplomas y trofeos, pero también el reconocimiento de los asistentes, pues el desempeño durante los combates, le llenan el ojo a cualquiera; en la competición CONADE realizada en el puerto de Veracruz el pasado mes de marzo, se trajeron una medalla de plata y otra de bronce, pero la vox populli le otorgó el primer sitio, ante la polémica decisión del jueceo.

El mes pasado asistieron a la competencia de box organizada por CONADE en el puerto de Veracruz donde se trajeron dos medallas (Foto: Jorge Huerta E.)

Goyo García, quien fortuitamente se convirtió en entrenador, pues una de sus hijas le pidió que la entrenara, y, aunque ella claudicó tiempo después, uno de sus nietos, quien apenas cumplirá diez años, desde ese entonces se ha convertido en su más ferviente alumno; desde antes de la pandemia inició con el menor en el parque Fundadores, en la colonia Las vegas.

Una vez que pasó la contingencia recibió la ayuda de varias personas, entre ellas un ingeniero de apellido Luna, que le apoyaron en el levantamiento de la galera que actualmente ocupa como gimnasio. Desde entonces se le han ido sumando niños y niñas que quieren aprender. La disciplina es una de las características de la escuela de box. Los niños que acuden siempre llegan puntuales, ya que el tiempo es un factor importante, no por algo una pelea se puede ganar o perder por un solo segundo.

Al menos una docena de futuros boxeadores practican de lunes a viernes el deporte de los puños (Foto: Jorge Huerta E.)

Y aunque esta es una actividad secundaria para él, Goyo García no escatima el tiempo para la preparación de sus alumnos. Él se dedica a pintar y impermeabilizar los techos de las casas, sin embargo, ante la necesidad de sus aprendices asegura que podría quedarse en el gimnasio a entrenar, incluso hasta las 10:00 de la noche.

Además, comenta que está pensando abrir un grupo en el turno matutino, pues algunos estudiantes que estudian por las tardes no tienen oportunidad de practicar en Poza Rica, pues la mayoría de actividades culturales, deportivas y de recreación se imparten por las tardes.

Necesidad de apoyos

 Sabemos que no es la primera disciplina en la ciudad que requiere apoyo, pues la gran cantidad de menores de edad que practica alguna actividad lo hace desde un mar de necesidades, aun así, el ánimo no decae. Para continuar con su formación los peleadores tienen que salir de la ciudad ante la falta de combates locales, para ir a ver, o ellos mismos participar. Hay que gastar en transporte hospedaje y alimentos; no hay autoridad que apoye.

Una lona publicitaria es el fiel testigo de una de las peleas de JC Chávez donde participó en boxeador local y hoy entrenador Gregorio García Hernández (Foto: Jorge Huerta E.)

Ahora bien, él ha encontrado la manera de solventar algunos de los gastos con apoyo de personas altruistas, incluso de sus hermanos, otras veces les pagan la comida, de tal manera que paulatinamente han sobrellevado sus actividades. Otro aspecto es la división que existe entre las comisiones (organizaciones), que no se ponen de acuerdo para las actividades necesarias del fogueo de los deportistas.

El maestro, quien acumuló 48 peleas en el profesionalismo, pues no tuvo la oportunidad de hacerlo de forma amateur, tuvo que saltar ese paso ante la necesidad que lo llevó a disputar sus encuentros en escenarios contra boxeadores de mucha experiencia y hasta campeones del mundo, algo que comparte con la niñez de Poza Rica.

Maestros y alumnos de la escuela de boxeo Gregorio García ya empiezan a cosechar frutos de su esfuerzo (Foto: Jorge Huerta E.)

Trato igualitario

Otro aspecto de la escuela de box Goyo García es el trato igual para todos, pues tanto niñas como niños realizan los mismos ejercicios de entrenamiento, las féminas suben también al ring con los varones para intercambiar golpes, pero siempre bajo la mirada y supervisión de su maestro, quien da las indicaciones pertinentes de manera puntual, quien además cuenta con el apoyo de su auxiliar Abimael Márquez de Luna.

El maestro Goyo García cuenta con Abimael Marquez de Luna, dentro de su equipo de auxiliares que apoyan a los jovenes (Foto: Jorge Huerta E.)

Afirma que el guanteo es especial, y no importa el género. García Hernández ve el futuro con agrado para sus alumnos, pues avizora que el año entrante al menos dos de sus jóvenes promesas debuten de manera profesional, pero explica que el trabajo es cada vez más fuerte, más extenuante.        

Dice que en Poza Rica y la región existen niños con cualidades para este deporte, por lo pronto le han pedido que participe con peladores para funciones en la localidad y en municipios vecinos, en este momento tendrá una función a fin de mes en Coatzintla donde llevara al menos siete niños para hacer una prueba y de ahí seleccionar a quienes incluirán en la función. (13/abril/2024)

vea la noticia de la apertura de clases matutinas de box https://www.informatepr.com.mx/noticias/inician-clases-matutinas-de-box-con-entrenador-profesional-comparte-experiencia-goyo-garcia/

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