– ¿Qué pasó?
Por Mario Noriega Villanueva/ informatePR
Es muy cierto que nunca antes se había sucedido una actitud tan cortante del presidente Andrés Manuel López Obrador, hacia el alcalde Fernando Luis Remes Garza, durante una visita a la ciudad, que hizo soltar una serie de comentarios todos negativos hacia el gobernante pozarricenses.
No hubo la fiesta con la que Remes Garza, recibía López Obrador, con abrazos y quién sabe cuánto más. Es posible que ante lo que antes sucedía, que si llegaba el presidente, el alcalde se deshacía en darle una atención extrema y no lo soltaba un segundo, pero últimamente se han dado cosas que manifiestan la enemistad entre el jefe de gobierno de Poza Rica con el gobernador Cuitláhuac García Jiménez y también con la titular del Congreso local, diputada Cecilia Guevara de Elías, que por cierto desataron una guerra entre si e hicieron que está urbe se desuniera más todavía.
Eso ha de haber hecho que el presidente, súper amigo de Fernando, tomara decisiones para hacerlo reaccionar y terminar con estos choques políticos, o bien que el alcalde adoptará otra actitud menos festiva con AMLO. Por eso es que no se le vio en algunos de los eventos que esté presidio por esta región. Sea lo que sea, esto debe cambiar las actitudes de Cuitláhuac, Cecilia y Fernando, porque todo repercutirá en contra del MORENA ante las próximas elecciones del 23 y con mayor razón, del 24.
No hay que olvidar que Poza Rica representa un buen de votos para cualquier elección y el presidente de la República, no quiere tomar riesgos por actitudes tan negativas de los tres funcionarios, quienes se «creen mucha pieza» y que solo «sus chicharrones truenan». AMLO vino a poner orden, si se ve así, para no arriesgar las elecciones que se avecinan sobre todo, la del 24. ¿No creen ustedes?
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