Agustín Valencia asegura ser poseído por un espititu que le ayuda a curar (Foto: Jorge Huerta E.)
Agustín Valencia asegura ser poseído por un espititu que le ayuda a curar (Foto: Jorge Huerta E.)

– Asevera que no es brujería; veneran en Coatzintla a Santa Cecilia, patrona de los músicos

Por Jorge Huerta E./ informatePR

(InformatePR 2007).- «Por que todos debemos creer en algo, así como usted, como todos los seres humanos», afirma enfático Agustín Valencia, espiritista quien asegura que es poseído por una mujer que nació en la ciudad de Tampico, en Tamaulipas. Cecilia C. de Gómez, quien curaba y daba la luz espiritual. 

La entrevista transcurre en una casa muy modesta de madera, en la cabecera municipal de Coatzintla. La sala de espera es un corredor de tierra y el ambiente se percibe un aroma extraño, una mezcla de olores inexplicables, no agradables para mi gusto. 

El cuarto donde el señor Agustín realiza las sesiones se encuentra un altar. La imagen más sobresaliente es la de la Santa muerte a quien se levantan las plegarias de la mayoría de los feligreses que llegan al lugar. 

De la garganta de Agustín Valencia sale una voz con tono agudo, aparentemente de mujer. Él afirma que es el espíritu de Cecilia C. de Gómez, quien se le apareció cuando era un niño «Ella me dio la oportunidad; porque yo estaba muy mal, muy enfermo. Y me dijo yo estoy contigo pero tú siempre glorifícame. En la oración de anoche me dijo que glorificara su nombre. Y es una voz muy tuene». 

En el momento que ella se va, Agustín se desvanece. «Se fue», exclaman los asistentes. 

Dentro del centro de atención se encuentran figuras religiosas y también la santa muerte



En la plática, Agustín Valencia explica que su abuela, fue una espiritista muy grande. Sobre ese régimen, asegura que nació bajo un don; un día se le manifestó Cecilia C. de Gómez como cualquier ser de Luz, como la Virgen, como la Muerte, como todo… 

Él dice que los días 21 y 22 de noviembre se le apareció Cecilia C. de Gómez, mujer que vivió en la ciudad de Tampico en Tamaulipas. Ella le dio el Don de curar y él le juró que siempre le iba a celebrar con una fiesta, no importa si era pequeña o grande. Lo haría. 

Y hace una analogía de Santa Cecilia, actual patrona de los músicos, que fue castigada por la santa inquisición por decir que escuchaba cantar a los ángeles. Fue decapitada por brujería. Y ella, a su vez se le apareció en la ciudad de Tampico Tamaulipas a Cecilia C. de Gómez

Que no es brujería 

«La sra. Cecila C. de Gómez siempre fue considerada virgen por cantarle a los ángeles del cielo y ella, siempre tan grande y tan poderosa, así como tú lo eres en este momento que vienes a entrevistarme. Va a ser siempre un ejemplar ante la luz espiritual, porque siempre necesitamos creer en algo o alguien con energía». 

«…y a veces creemos en unas cosas a veces no creemos en nada».

Ella me dio la oportunidad; porque yo estaba muy mal, muy enfermo. Y me dijo yo estoy contigo pero tú siempre glorifícame…» 

Y aunque dice que a veces debemos de creer en algo, afirma: «esto no es brujería, como dicen; y cuando no conocemos un gramo de esa índole, pues te quedas muy pobre». La entrevista se realiza en el municipio de Coatzintla, en el corazón del totonacapan.

Prosigue; «cada quien tiene su religión. Cada quien tiene su mentor. Ellos son autóctonos (dice de los totonacas al preguntarle por las danzas efectuadas el día de Santa Cecilia), ellos son indios, hacen sus rituales al sol. En Papantla había un curandero Palemón Morales, que ya falleció, Él hacia un altar grandísimo allí en el parque, pero esto nada tiene que ver con eso», aclara. 

Sacerdotes no, Dios sí

Reafirma que siempre necesitamos de alguien. «Como uno va a la iglesia. Creo en Dios todopoderoso». 

Pero también precisa «No creo en los Padres (sacerdotes), no creo en las Iglesias, porque es una mafia. No creo en un ser que dice como los aleluyas que dicen: Glorifica a Dios y al ratito están haciendo trampas. No creo en eso». 

«Yo creo en el santísimo rosario, en el santísimo sacramento, en nuestro señor Jesucristo, la santísima Virgen. Como le dije a un amigo: Yo no necesito ir a confesarme con el cura, yo necesito ir debajo de un árbol a Decir ¡Aquí estoy Padre mío!». 

Agustín Valencia que reside en el extranjero, viene a menudo a Coatzintla y asegura que las consultas no son con fines lucrativos. «La gente me deja lo que quiere, lo que puede». La celebración a Santa Cecilia y/o a Cecilia C. de Gómez sale de su bolsillo. 

Cada año se lleva a cabo la celebración, el 22 de noviembre. El día del músico. En la casa de Agustín Valencia se hace ofrenda a Santa Cecilia (santa de la iglesia católica), se hace una misa con rezos; también se efectúan danzas totonacas como los negritos y se sirve un banquete que en muchas ocasiones es zacahuil hecho en horno de barro. 

«Así como un presidente te da el poder, ella lo da, lo tenemos y lo justificamos. Por eso decimos Dios de Dios de la misericordia, que bueno que podamos tener en este momento estas cosas… A veces cosas bonitas, cosas que queremos, que no podemos, etc. 

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